21Octubre

El día de ayer prometía marcar un antes y un después en la agenda política de este país, y al final no decepcionó. Quedaron varias cosas claras:

Primera, que una buena parte del electorado prefiere votar a los partidos institucionalizados del régimen a pesar de todo. Esto lo explica mejor que yo Isaac Rosa en su artículo de ayer, os recomiendo su lectura.

Segundo, el hundimiento del PSOE. Antes de que empezara el recuento ya escribí en mi cuenta de twitter, que lo único que daba por seguro era este hundimiento. Y es que se lo están ganando a pulso. No son una alternativa y la gente se da cuenta. Han perdido 14 diputados entre Galicia y País Vasco.

Tercero, la injusticia de la ley electoral es cada día más palpable. El PP en Galicia ha ganado sí, pero su descenso en número de votos y porcentaje se traduce en 3 diputados más. Tiene la lógica de la injusticia. Algo parecido ocurre en el País Vasco donde IU con 8.000 votos más que UPyD no tiene diputado y el partido nazi-magenta sí.

Cuarto, el espectacular resultado cosechado por Alternativa Galega de Esquerdas, coalición electoral del eterno Xosé Manuel Beiras con Esquerda Unida a la que se sumaron EQUO y Espazo Ecologista. Consiguen 9 escaños y más de 200.000 votos. Hay alternativa.

Pero que no sirva este éxito para justificar cualquier pacto con cualquier partido. Izquierda Unida tiene que sumar, abrir su proyecto pero sin perder la honradez, la coherencia, y la dignidad. El resultado Gallego no puede usarse como excusa para atacar a Ezker Anitza y su negativa al pacto con la Ezker Batua de Madrazo y cia. Con mafiosos ni a la vuelta de la esquina.

Y el 25N las catalanas. Seguiremos opinando.