Éxito en el acto contra las 65 horas
El pasado día viernes 27 de junio, cerca de 40 personas entre ponentes y público participante, se reunieron en el local de Izquierda Unida Orihuela, en la Calle Rufino Gea nº 7 (la travesía que conecta el Casino con el Teatro Circo). El motivo del encuentro fue el estudio y debate del porqué la Unión Europea quiere imponernos la nueva jornada laboral de hasta 65 horas (72 en determinados casos según el ponente Abilio Vaillo).
A la cita, a la que fueron invitados todos los partidos políticos de Orihuela, asistieron 3 partidos locales y por supuesto la coalición de Izquierda Unida, que estuvo representada entre los ponentes por Abilio Vaillo Rueda (Secretario de Organización y Responsable del Movimiento Obrero de IU Orihuela). Por parte de Los Verdes asistió Antonio García , del Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) habló Julio Díaz y del Partido Comunista de España (PCE) asistió Rafael Gallardo. El resto de partidos oriolanos, no aceptaron la invitación y ni tan siquiera se dignaron en responder. Algo muy contradictorio, ya que recordemos que supuestamente tanto el PSOE como el PP a nivel estatal están en contra de dicha directiva. Quizás en realidad, no lo estén tanto.
Respecto a la representación sindical, asistió José Martínez Carmona de la Plataforma Unitaria de los Trabajadores (PUT) y Juan Antonio Menargues Garri de Comisiones Obreras (CCOO). Sin embargo, también sorprendentemente, faltó el representante de UGT: José Antonio Pertusa. Sindicato que tampoco mandó a un sustituto con un día de margen. Quizás la cúpula de UGT no tenga entre sus prioridades luchar contra una jornada que dejará a los trabajadores como si vivieran al principio del siglo XIX, o sea hace 200 años.
Entre los temas hablados además de la Directiva de las 65 horas, se tocó la llamada Directiva de la Vergüenza de la UE, que quiere poder meter en cárceles o “campos especiales” a los inmigrantes indocumentados que sus países no acepten repatriarlos, incluido menores de edad, es decir: niños y adolescentes.
Una de las principales conclusiones que todos los allí presentes compartieron, fue la necesidad de que la clase trabajadora se una bajo sus propios intereses y luche por sus derechos. Si hace falta, rompiendo los actuales esquemas sindicales y partidistas si estos no responden a sus demandas. Por otra parte, se comentó la necesidad de una nueva cultura ligada a los trabajadores, que le sea propia y no impuesta por las empresas desde los medios de comunicación. Todos los ponentes dieron su palabra de contar con ellos para futuras movilizaciones conjuntas contra la Directiva Europea.
El acto contó con la participación de un público interesado y participativo que no dejó de preguntar a los ponentes, hecho por el cual el acto se alargó más de lo previsto, superando las dos horas de duración.
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